Sobre mis dibujos

Si tuviera que sintetizar en dos palabras mi estilo a la hora de dibujar, lo denominaría hiperdetallismo orgánico.

Con hiperdetallismo quiero decir que la mayoría de mis dibujos exhiben una gran cantidad de detalles, muchos de los cuales requirieron de la asistencia de una lupa (3 aumentos) para ser ejecutados. Son detalles que a menudo van asociados a formas muy complejas y que fácilmente pueden recordar a estructuras que podríamos encontrar en la Naturaleza.

Efectivamente, algo que caracteriza a una gran parte de mis dibujos son esas formas que evocan un microcosmos de células, tejidos o protozoos, que, en ocasiones, pueden vincularse a colonias de organismos, plantas y árboles o a un macrocosmos de planetas, nebulosas o galaxias.

El origen de todo este Universo gráfico tuvo lugar a principios de los años noventa y se vio plasmado en mi primera obra: Paisaje astral (Opus 1A).

En ella, se puede apreciar claramente el hiperdetallismo de los trazos y de las formas, así como los motivos orgánicos bajo la apariencia de una profusa flora y fauna de corte onírico.

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Veintiún años después de una completa inacción artístico-gráfica, resurge en mí el anhelo de dibujar, casi como una necesidad orgánica; y nunca mejor dicho.

Sin embargo, ese gran lapso de tiempo ha obrado en mí muchos cambios personales, cambios en mi forma de ser y de ver el mundo que se dejan sentir en la técnica artística, pues paso del DIN A3 al DIN A2 (ampliando horizontes), y sustituyo los estilógrafos del 0,2 y del 0,4 por lápices duros y blandos, aunque la lupa sigue estando omnipresente.

A pesar del transcurso del tiempo, para mí sigue estando vigente ese hiperdetallismo orgánico que caracterizó mi primera etapa, pero ahora las tramas y las estructuras de mis dibujos son mucho menos densas, se aligeran, y el blanco y el negro dan paso a una generosa escala de grises, lo que en el fondo no hace sino espejar mi cosmovisión del mundo.

Inicio esta nueva etapa con Fitozoomorfo estacionario (Opus 1B_4.37).

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Meses más tarde, afloran en mí las ganas de aventurarme con el color, con lo que se abre una nueva etapa. Colonia de organismos simbióticos (Opus 5C_3.09) es un perfecto representante de este período, en el que combino el lápiz con la tinta y la acuarela.

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Recientemente (primavera del 2017), he sumado a mi producción artística una nueva área: las imágenes generadas por ordenador, mediante el uso de una tableta gráfica. Un terreno completamente distinto al de los utensilios tradicionales que abre un mundo inmenso de posibilidades. Muestras de ello son las siguientes obras: